Un histórico centro tradicionalista de Adrogué debió ceder los terrenos que ocupa desde hace más de 35 años y salió a denunciar que una empresa constructora -que pagó 5 mil dólares por las cinco hectáreas- pretende realizar allí un emprendimiento inmobiliario. «Nos dejaron en la calle de un día para el otro», dijeron.
Se trata del Centro Tradicionalista Los Candiles, que debió ceder sus terrenos de cinco hectáreas. «Con mucha tristeza queremos informar que de un día para el otro el centro tradicionalista ha sido desalojado del predio donde veníamos desarrollando nuestras actividades. Actualmente nos encontramos a la espera de una posible reubicación, pero mientras tanto todas las actividades quedan suspendidas hasta el nuevo aviso. Agradecemos profundamente el apoyo de cada persona que forma parte de esta gran familia. Seguiremos luchando por este espacio que tanto nos representa», dijeron en sus redes sociales.
Las tierras en disputa están ubicadas en la calle Comodoro Py, esquina Presidente Perón, en Adrogué, en un sector lindante al Parque Saludable Ramón Carrillo, un espacio municipal recientemente inaugurado por la gestión de Mariano Cascallares, y al lado del estadio Lorenzo Arandilla, la cancha de Brown de Adrogué.
Según fuentes de ese centro tradicionalista, una inmobiliaria de Burzaco realizó una tasación sobre el inmueble y determinó que el valor de mercado alcanzaría unos 20 millones de dólares, debido a la escases de tierras disponibles en esa zona y a la posibilidad de lotear el espacio para generar una gran cantidad de unidades funcionales. «En el expediente consta que la empresa pagó 5 mil dólares por esos terrenos», dijo Adrián, integrante de la comisión directiva de Los Candiles, respecto al boleto presentado en el Juzgado Civil y Comercial 7 del Departamento Judicial de Lomas de Zamora.
En el espacio se dictaban clases de equitación, había un merendero abierto a la comunidad, se organizaban peñas folklóricas y diversos espectáculos gauchezcos para reunir donaciones para los hospitales de la región, por ejemplo. Incluso cedieron un espacio para que jóvenes del barrio armasen una cancha de fútbol que hasta la semana pasada utilizaron para la práctica deportiva.
Los integrantes del centro tradicionalista dicen que una empresa constructora llamada Sauber, perteneciente a Walter Bañasco y Marcelo Mozzo, se quedará con el espacio que Los Candiles ocupó durante décadas en comodato municipal. Ahora, la empresa construiría allí un desarrollo inmobiliario. Las tierras habían sido cedidas en comodato por el gobierno municipal hace más de 35 años, con fines culturales y de preservación de las tradiciones, algo que los integrantes de Los Candiles viven también como un atropello en su lucha por «no dejar que arrasen con la identidad de un pueblo».